domingo, 7 de noviembre de 2010

EL ANTICRISTO

2 Tesalonicenses 2:1-10


¨Pero con respecto a la venida de nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os rogamos, hermanos, que no os dejéis mover fácilmente de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra, en el sentido de que el día del Señor está cerca. Nadie os engañe en ninguna manera; porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, el cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios. ¿No os acordáis que cuando yo estaba todavía con vosotros, os decía esto? Y ahora vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que a su debido tiempo se manifieste. Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio. Y entonces se manifestará aquel inicuo, a quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y destruirá con el resplandor de su venida; inicuo cuyo advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y señales y prodigios mentirosos, y con todo engaño de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no recibieron el amor de la verdad para ser salvos¨.

No me cabe la menor duda de que el anticristo será una persona y no una institución o sistema, pero él sí será el representante de un poder político que estará imperando en el momento en que surja. Será un personaje nefasto, un inicuo, como bien lo llama Pablo en 2 Tesalonicenses 2:8. El anticristo es descrito por el profeta Daniel como alguien desprovisto de todo escrúpulo: ¨Y el rey hará su voluntad, y se ensoberbecerá, y se engrandecerá sobre todo dios; y contra el Dios de los dioses hablará maravillas, y prosperará, hasta que sea consumada la ira; porque lo determinado se cumplirá. Del Dios de sus padres no hará caso, ni del amor de las mujeres; ni respetará a dios alguno, porque sobre todo se engrandecerᨠ(Daniel 11:36,37).

Como hemos dicho, la aparición del anticristo en el mundo es lo que marcará el inicio del fin del gobierno humano. El anticristo aparecerá en un momento de grande crisis política en la humanidad. Este será un líder aclamado por la humanidad y se presentará como el que resolverá el gran conflicto del momento, pero luego se manifestará a sí mismo tal como es.

El anticristo es la bestia que sube del mar que es descrita en Apocalipsis 13, y que es apoyado por la bestia de la tierra que es el falso profeta y que a su vez cumple los designios del dragón que es el diablo (Apocalipsis 13). Este triunvirato viene siendo la manifestación del usurpador por excelencia, queriendo presentarse como si fuera Dios, en la trinidad diabólica. Es por ello que el número que lo representa en la Biblia es el 666, el número de la imperfección reafirmado tres veces, la unión de la ambición humana con la astucia diabólica para hacer un último intento de usurpar a la verdadera trinidad divina. Mediante la manifestación de un poder engañoso, el anticristo logrará convencer a mucha gente, pero es claro en la Biblia que los creyentes verdaderos se darán cuenta de su verdadera identidad.

La palabra anticristo como tal sólo se menciona en la Biblia en 1 Juan capítulo 2, aunque la alusión a este personaje está diseminada por toda la Biblia en otros términos que significan lo mismo. Leamos el pasaje de 1 Juan 2:18-22 y hagamos una definición de la palabra anticristo: ¨Hijitos, ya es el último tiempo; y según vosotros oísteis que el anticristo viene, así ahora han surgido muchos anticristos; por esto conocemos que es el último tiempo. Salieron de nosotros, pero no eran de nosotros; porque si hubiesen sido de nosotros, habrían permanecido con nosotros; pero salieron para que se manifestase que no todos son de nosotros. Pero vosotros tenéis la unción del Santo, y conocéis todas las cosas. No os he escrito como si ignoraseis la verdad, sino porque la conocéis, y porque ninguna mentira procede de la verdad. ¿Quién es el mentiroso, sino el que niega que Jesús es el Cristo? Este es anticristo, el que niega al Padre y al Hijo¨.

De todo lo dicho por el apóstol Juan en su carta podemos deducir que el anticristo es alguien que puede ser definido como opuesto o contrario a Cristo, como alguien que pretende suplantar o usurpar a Cristo, o sea que se presentará diciendo que es el Mesías, siendo mentira. Así que toda persona, o religión, secta, grupo, entidad, sistema, o lo que sea, que manifieste o haya manifestado estas características en algún momento, debe ser considerado como un anticristo o tipo de anticristo. Sin embargo, es bueno que se sepa que el anticristo propiamente dicho aún no se ha manifestado en el mundo. Es por esto que el apóstol Juan advierte a los creyentes acerca del espíritu de engaño anticristiano que se manifestará de muchas maneras en el mundo antes que aparezca el personaje en sí: ¨y todo espíritu que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del anticristo, el cual vosotros habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo¨ (1 Juan 4:3). Sin duda alguna que podemos encontrar estas señas manifestadas en muchas sectas en el día de hoy.

Al través de la historia podemos identificar a muchos personajes políticos como tipos de anticristos. Por ejemplo podemos hablar de Hitler, y la manera como este logró convencer a mucha gente para que lo siguieran y apoyaran en sus propósitos de querer conquista mundial. El anticristo será un personaje con una influencia similar, sólo que será superior en mucho a cualquiera de estos líderes históricos. El anticristo será la personificación misma de Satanás en un hombre.

El apóstol Pablo dice que alguien detiene la manifestación del anticristo en el mundo, y que cuando ese impedimento le sea quitado, entonces él se manifestará: ¨Porque ya está en acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de en medio¨ (2 Tesalonicenses 2:7). Creemos que el propio Dios detiene o frena al anticristo para que no se manifieste hasta el momento en que Dios ha determinado que esto ocurra. Esto concuerda con lo que nos dice el apóstol Pedro acerca del plan de Dios de dar tiempo a los impíos para que se arrepientan: ¨El Señor no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos procedan al arrepentimiento¨ (2 Pedro 3:9). Así que la razón porqué el anticristo no se ha manifestado en el mundo, es porque cuando esto ocurra, eso marcará el inicio del fin de la oportunidad del hombre para ser salvo. La manifestación del anticristo será la antesala del fin de oportunidades para este mundo, y es muy posible que durante la persecución que este personaje dirigirá contra los santos, muchos sean tocados y convencidos para seguir a Cristo en momento tan crucial.

El anticristo será un líder malo y dictador, pero con grande influencia en lo político, en lo económico y en lo religioso, así que tendrá una gran influencia en todos los ámbitos de la vida social del mundo.

Quiero que veamos tres cosas que el anticristo representa.

1.- El Anticristo Representa el Intento del Hombre por Gobernar el Mundo sin Dios.

El hombre siempre ha pretendido erradicar del escenario cualquier forma de concepción de Dios. Esto ha degenerado en lo que se denomina la filosofía ateísta. Este asesinato de Dios procura al mismo tiempo la glorificación del hombre. De este empeño de los hombres surge el humanismo, una forma sutil de colocar al hombre en el lugar que le corresponde a Dios, planteando así la supremacía del ser humano en la civilización. Y esto no es nuevo, pues recordemos como Nabucodonosor se mofaba de su propia grandeza: ¨habló el rey y dijo: ¿No es ésta la gran Babilonia que yo edifiqué para casa real con la fuerza de mi poder, y para gloria de mi majestad?¨ (Daniel 4:30). Vemos aquí todo el orgullo y toda la arrogancia en una persona que se cree autosuficiente.

El hombre va tras la búsqueda de un mundo donde Dios no sea necesario, y todo este deseo egocéntrico del corazón humano está por encima de toda razón, toda vez que la razón misma corrobora en cada uno de nosotros la existencia de Dios.

El sistema político denominado como comunismo puede ser descrito como un tipo de anticristo, pues el comunismo siempre ha sido un abanderado del ateísmo, y ha perseguido, encarcelado, torturado y dado muerte a miles de cristianos en los países donde este régimen político ha imperado. Con su gran estilo propagandístico, el comunismo ha planificado la intimidación de quienes les adversan. Este sistema político ha sido cruel y despiadado, tal y como lo será el anticristo cuando aparezca. Así que todos esos tipos de gobiernos totalitarios que han existido han sido como un ensayo del diablo, una muestra de lo que será el anticristo propiamente dicho. Si estos son los símiles, ¿ qué será entonces la propia realidad?

El anticristo será un gobernante sin corazón y sin sentimiento, sin respeto ni consideración de ninguna clase; sus actuaciones estarán en franca violación de los derechos más elementales de la vida humana.

2.- El Anticristo Representa a Todos los Imperios Humanos Que han Dominado el Mundo.

El anticristo representa el estilo de gobernar del hombre influenciado por el príncipe de este mundo. Podemos decir que el anticristo será el más fiel intérprete y practicante de la doctrina de Maquiavelo, porque toda la filosofía mundana vertida en el famoso libro El Príncipe no es más que la inspiración del propio Satanás. En su libro, Nicolás Maquiavelo desvela los horrores de los que puede ser capaz el ser humano cuando ostenta el poder. Lo que allí se plantea es el único interés de mantener el poder sin tomar en cuenta ningún principio moral. De esta idea resulta la famosa frase ¨el fin justifica los medios¨, y creo que esta será la premisa del anticristo: la conquista de los pueblos, el avasallamiento de naciones para lograr ser exaltado como Dios a costa de lo que sea.

Cada uno de los imperios que ha existido ha pretendido dominar el mundo e influenciar a los hombres en lo político, lo económico y lo religioso aunque para ello tenga que perder hasta su propia alma. Podemos ver como en su afán de conquista el hombre ha arrasado con pueblos y culturas que han quedado en el olvido, como lo ocurrido en América con el exterminio de muchas razas aborígenes por parte de los conquistadores españoles, como ha ocurrido en nuestra isla Española en República Dominicana.

El anticristo, en este sentido de conquista por medio de la fuerza está representado en el jinete del caballo blanco de Apocalipsis 6:2: ¨ Y miré, y he aquí un caballo blanco; y el que lo montaba tenía un arco; y le fue dada una corona, y salió venciendo, y para vencer¨. Lo que este jinete arrastra tras de sí es una oleada de guerra, hambre, muerte y terror. Entonces el mundo ya ha probado al través de la historia las ráfagas malignas del anticristo en los personajes que le han precedido como sus precursores.

En su afán de grandeza y ávido de reconocimiento y gloria, al igual que han hecho los grandes emperadores de la tierra, el anticristo levantará estatuas en su honor y demandará ser honrado como si fuera Dios: ¨Y engaña a los moradores de la tierra con las señales que se le ha permitido hacer en presencia de la bestia, mandando a los moradores de la tierra que le hagan imagen a la bestia que tiene la herida de espada, y vivió. Y se le permitió infundir aliento a la imagen de la bestia, para que la imagen hablase e hiciese matar a todo el que no la adorase¨ (Apocalipsis 13:14,15). Esto nos recuerda el caso de Nabucodonosor que mandó a hacer una estatua de oro para que todo el mundo la adorase so pena de ser echados en un horno de fuego: ¨Y el pregonero anunciaba en alta voz: Mándase a vosotros, oh pueblos, naciones y lenguas, que al oír el son de la bocina, de la flauta, del tamboril, del arpa, del salterio, de la zampoña y de todo instrumento de música, os postréis y adoréis la estatua de oro que el rey Nabucodonosor ha levantado; y cualquiera que no se postre y adore, inmediatamente será echado dentro de un horno de fuego ardiendo¨ (Daniel 3: 4-6). Pero el rey encontró oposición en los amigos de Daniel, los cuales se negaron a adorar la estatua. De esta misma forma encontrará también oposición el anticristo cuando aparezca, y los protestantes tendrán el auxilio y el socorro de Dios, como fue el caso de estos tres valientes en Babilonia.

3.- El Anticristo Representa a Satanás Mismo Como Gobernante de la Tierra.

El poder que tiene el anticristo o bestia del mar le es conferido por el dragón que es el diablo. Esto es la imitación que el diablo quiere hacer de Jesucristo. Así como Jesucristo dijo que no hablaba por su propia cuenta, sino que todo lo que decía era por mandato de su Padre, el anticristo no hablará por su propia cuenta, sino que él será poseído demoníacamente por el propio Satanás para decir y hacer lo que él quiera. El poder manifestado por el anticristo entonces, no será un poder humano, sino que será un poder sobrenatural que le será conferido por el diablo. Así que todo lo que tiene que ver con el anticristo será algo del más allá, será un ser posesionado por el diablo y que mostrará la manifestación de todos los poderes ocultos. Es por esto que el anticristo es acompañado por la bestia que surge de la tierra, el falso profeta, que lo representa y que habla en su favor. El falso profeta será el portavoz, la contraparte mágica del anticristo, etc.

Me parece vital que en este punto usted lea detenidamente el drama del anticristo tal y como nos lo presenta Apocalipsis 13:1-18.

El anticristo será un ser malvado con una mente con estilo maquiavélico que se presentará como un típico político corrupto que procura parecer como alguien que está bien con Dios y con el diablo. Las garras de su poder lo abarcan todo, desde el poder religioso, hasta el poder más bajo del crimen y la violencia. En principio, como hacen los políticos comunes, se escudará en su hipocresía y cinismo elocuentes, como lo hacen los políticos sagaces del día de hoy; pero luego se manifestará tal cual es, demostrando con grandes prodigios y señales engañosas el poder satánico que lo acompaña.

Después de su encono contra la iglesia y contra los santos de Dios, durante el tiempo de la gran tribulación, el anticristo le declarará la guerra al Señor Jesucristo en la batalla de Armagedón donde él será finalmente derrotado y lanzado junto con el falso profeta en el lago de fuego, que es el infierno.

Leandro González

Mensaje predicado en la Primera Iglesia Bautista de Mao, República Dominicana, el 7 de noviembre de 2010.




domingo, 31 de octubre de 2010

LA ESCATOLOGIA A LA LUZ DE LA BIBLIA

Mateo 24:3


¨ Y estando él sentado en el monte de los Olivos, los discípulos se le acercaron aparte, diciendo: Dinos, ¿cuándo serán estas cosas, y qué señal habrá de tu venida, y del fin del siglo? ¨

En este punto estamos llegando a la culminación de nuestro tema general durante este año: Verdades Esenciales de la Fe Cristiana. A partir de hoy entramos en un tema muy apasionante: La escatología. La escatología tiene que ver con las últimas cosas, eso es lo que significa el término, que viene de la palabra griega ¨Eschatos¨, ¨último¨, esto se refiere a la doctrina de las últimas cosas.

Los hechos de la historia no son cíclicos como creen algunos, sino que según la Biblia los hechos de la historia siguen un proceso lineal; o sea, la historia se dirige hacia una meta determinada por el Creador. Esto plantea la maravillosa idea de que pese a todo lo pesimista que se presenta la inexorable perdición humana, Dios hará que al final, el bien triunfe sobre el mal, instaurando un mundo de justicia y de paz.

Si bien es cierto que el reino de Dios se ve manifestado en el estilo de vida de los verdaderos creyentes en todo el mundo, todavía veremos ese reino visible, político que será establecido por Jesucristo por toda la eternidad.

Creemos que el orden bíblico es el siguiente para esta serie de acontecimientos que marcarán el desenlace definitivo de la historia y la segunda venida de Cristo y el fin del mundo: El anticristo, la Gran Tribulación, la batalla de Armagedón, la resurrección de los cristianos y la transformación de los cristianos vivos (el rapto) juntamente con la segunda venida de Cristo, el milenio de Jesucristo, el juicio final, el fin del mundo, y los nuevos cielos y nueva tierra con el reinado eterno del Señor.

Cada uno de estos grandes eventos será tratado cada domingo de los que nos restan en este año. En el día de hoy haremos un planteamiento general de lo que será nuestro orden de presentación para estas exposiciones.

1.- Hechos Que Marcan el Desenlace Definitivo de la Historia.

Aquí nos referimos al gobierno humano. No hay duda de que nos encontramos viviendo en los tiempos finales. Al mundo le queda muy poco tiempo con relación a los miles de años que el hombre ha vivido sobre el planeta. Se calcula en unos seis mil años la estadía del hombre en este mundo, y esta es una cuenta que no es exacta. Así que no sabemos con exactitud cuál es el año verdadero en el que nos encontramos, y podría ser que no hayamos llegado en realidad a los seis mil años a los que aludimos en la actualidad. Con todo esto queremos dejar sentado que no se sabe cuánto es el tiempo que ha transcurrido del gobierno humano sobre la tierra.

Según el calendario gregoriano que es el que se usa en el mundo en el día de hoy, estamos viviendo en el 2010 después de Cristo, o sea, en el 6010 después de la creación. Pero según el calendario judío estamos en el 5770, o sea que, según el calendario judío, faltarían unos 230 años para cumplir los seis mil años de la vida humana.

Me parece que tiene sentido pensar que el gobierno humano, o el período de tiempo del hombre sería de unos seis mil años, y que el séptimo milenio sea el milenio de Jesucristo, pero esto es una especulación. Decimos esto porque según la numerología apocalíptica y bíblica, el número 6 corresponde al número de hombre y el número 7 es un número que está relacionado con la perfección de Dios. Recordemos que Dios hizo el mundo en seis días, y que el sexto día hizo al hombre, mientras que el séptimo día descansó de toda la obra que había hecho: ¨Y acabó Dios en el día séptimo la obra que hizo; y reposó el día séptimo de toda la obra que hizo. Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó, porque en él reposó de toda la obra que había hecho en la creación¨ (Génesis 2:2,3). Tiene sentido entonces la idea de que el gobierno del hombre sobre la tierra dure un período de seis mil años, y que el milenio de Jesucristo corresponda al séptimo milenio después de la creación.

De todos modos, el hacer esta conjetura no posibilita de ninguna manera ningún cálculo para saber cuándo ocurrirá la segunda venida de Cristo, puesto que nadie sabe ni puede saber ese dato, pues Dios lo tiene vedado y es de su exclusiva competencia: ¨Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre¨ (Mateo 24:36).

Ahora bien, volvemos a recalcar que nadie sabe en qué año estamos, ni si hemos llegado al año seis mil de la creación, o cuánto falta para ello. Así que como han dicho algunos teólogos, tiene sentido que después de seis mil años de gobierno humano, entonces aparezca nuestro Señor Jesucristo para imponer su gobierno en la tierra por unos mil años en el séptimo milenio.

Pero una cosa sí es cierta, para que esto ocurra, primeramente se tiene que manifestar el anticristo en el mundo, cosa que todavía no ha ocurrido. Luego, durante el gobierno del anticristo se desatará una persecución y hostigamiento contra todos los creyentes que es llamado el período de la gran tribulación. Será un tiempo en el que muchos judíos se convertirán y reconocerán que Jesucristo es el Mesías verdadero. En el final de este tiempo se desatará en la tierra la guerra de Armagedón, posiblemente la tercera guerra mundial, que culminará con la derrota de las fuerzas del anticristo por parte de Jesucristo, el cual vendrá en las nubes con su ejército celestial y todos sus santos.

El anticristo y el falso profeta serán lanzados al lago de fuego, y Satanás será atado por unos mil años. Todo esto marcará el fin del gobierno humano sobre este mundo, para dar paso al gobierno milenial de Jesucristo. De estos hechos hablaremos en detalle cuando toquemos cada uno de estos temas.

2.- Hechos Que Se Enmarcan Dentro de la Segunda Venida de Cristo.

Jesucristo ha prometido que viene otra vez. Los ángeles dieron las nuevas de esta grande esperanza para todos los cristianos de todos los tiempos: ¨Y estando ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo¨ (Hechos 1: 10,11). Esto ocurrirá después que el anticristo reine por poco tiempo en el mundo.

Simultáneamente con la venida de Cristo los creyentes que han muerto serán resucitados, los creyentes vivos serán transformados. Esto lo entendemos como el rapto, pues los cristianos desaparecerán de este mundo en un abrir y cerrar de ojos, y de pronto se encontrarán en el cielo junto al Señor, y juntamente con él y con los ángeles, vendrán a este mundo para reinar con Jesucristo durante el milenio.

El milenio será un tiempo de grandes expectativas para un mundo caído, que probará aún en contra de su voluntad al único y verdadero benefactor. Durante este tiempo el Señor Jesús gobernará este mundo con vara de hierro. Existen varios pasajes que nos hablan de esto muy claramente: ¨Los quebrantarás con vara de hierro; como vasija de alfarero los desmenuzarás¨ (Salmo 2:9); ¨De su boca sale una espada aguda, para herir con ella a las naciones, y él las regirá con vara de hierro; y él pisa el lagar del vino del furor y de la ira del Dios Todopoderoso¨ (Apocalipsis 19:15). En el capítulo 14 de Zacarías vemos un retrato vivo de lo que será el gobierno de hierro del Señor en el tiempo del milenio. Pero de todo esto hablaremos en detalle en su momento.

3.- Hechos Que Demarcan El Fin del Mundo.



Mientras Jesucristo hace que la humanidad caída disfrute de su gobierno milenial, un tiempo durante el cual el diablo no tendrá ninguna influencia sobre la humanidad, porque estará fuera de combate, los seres humanos manifestarán toda su mala voluntad contra el gobierno de paz y justicia del Señor Jesús por su propia cuenta. Ellos se someterán al Rey de reyes por obligación, no porque lo amen. Esto mostrará toda la maldad que hay en el corazón humano y justificará enormemente toda la severidad del castigo que sobrevendrá por causa del pecado.

Al final del milenio Satanás será suelto, y de inmediato encontrará seguidores de entre toda la humanidad pecadora que había disfrutado del gobierno mesiánico. Esta última intentona del diablo será frustrada por el Señor. Esta será su derrota visible para todo el mundo, pues luego de todo esto será lanzado en el lago de fuego en donde ya estarán el anticristo y el falso profeta.

Más adelante los muertos impíos de todos los tiempos y de todas las categorías serán resucitados para el día del juicio final, donde serán reveladas todas las cosas, de tal manera que: ¨Y el que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego¨ (Apocalipsis 20:15).

Después de esto el mundo será destruido completamente con fuego y azufre: ¨pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos¨ (2 Pedro 3:7).

Todo esto dará paso a un mundo completamente nuevo: ¨ Vi un cielo nuevo y una tierra nueva; porque el primer cielo y la primera tierra pasaron, y el mar ya no existía más¨ (Apocalipsis 21:1).

Esperamos ver cada uno de estos temas por separado a partir del próximo domingo. Mientras tanto les invito a leer todo el libro de Apocalipsis.

Leandro González



Mensaje Predicado en la Primera Iglesia Bautista de Mao, República Dominicana, el 31 de Octubre de 2010.

domingo, 24 de octubre de 2010

DOCTRINA CATOLICA DE MARIA

Hechos 4:12


¨Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos¨

La iglesia católica ha hecho más daño al cristianismo que el que le han hecho todas las sectas juntas, pues ha inducido y sigue induciendo a su feligresía a la idolatría. El culto a María es un ejemplo suficiente para darnos cuenta de cómo puede el poder religioso y político manipular a la gente para creer una mentira.

Con las supuestas apariciones de la virgen, la iglesia católica le ha conferido a este dogma una relevancia y una influencia tan arraigada en el corazón de sus seguidores, que las diferentes advocaciones con que se conoce a la virgen en todo el mundo, arrastra a millones de personas a la idolatría todos los días, siendo una de las más famosas, la de la Virgen de Guadalupe en México.

Este culto a la virgen María está tan bien entronizado en el corazón de la gente y en su cultura, a tal grado que existe un gran negocio en torno de las imágenes de estas advocaciones. En nuestro país, República Dominicana, es muy famosa la Virgen de la Altagracia, que cuenta con un santuario en la ciudad de Higuey. Las pinturas de esta virgen, así como las réplicas de la misma, son un negocio muy lucrativo para quienes se dedican a ello. Esto recuerda lo ocurrido en la antigua ciudad de Efeso con el culto a la diosa Diana, que por poco le cuesta la vida al apóstol Pablo, episodio este que está narrado en Hechos 19:23-41.

El problema con los católicos es que quieren atribuirle a María todo lo que le concierne sólo a Jesucristo como el Hijo de Dios, y lo que corresponde sólo a Dios como Soberano del universo. Quieren hacer a María diosa, intercesora y co-salvadora.

El propósito de los católicos es pretender justificar con todos esos dogmas la adoración de María. Y es bueno aclarar que ellos no sólo adoran a María, y no es sólo a María a la que se le atribuyen poderes de mediación o de hacer milagros, sino que también entran en este juego, según ellos, los demás santos de la iglesia, a los cuales también le atribuyen poderes de mediación. Pero la Biblia claramente nos dice acerca de Jesús: ¨Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos¨ (Hechos 4:12). A esta práctica se le llama hiperdulía, o sea una exageración en el énfasis puesto en otra cosa que no sea Dios. Y esta es una cosa tan perniciosa en materia de religión, que degenera siempre en la idolatría, adorando la cosa en vez de adorar al que la hizo, como ya lo ha dicho el apóstol Pablo: ¨ya que cambiaron la verdad de Dios por la mentira, honrando y dando culto a las criaturas antes que al Creador, el cual es bendito por los siglos. Amén¨ (Romanos 1: 25).

Veamos rápidamente en qué consiste básicamente la adoración de María.

1.- Los Católicos Creen Que María No Tuvo Pecado.

A esto se le llama ¨la inmaculada concepción de María¨. La iglesia católica enseña que María fue concebida sin pecado, que no tenía pecado. Pero sucede que ella misma se declara pecadora cuando dice en respuesta a la noticia del ángel: ¨Porque ha mirado la bajeza de su sierva¨ (Lucas 1:48). Pero el que fue concebido sin pecado fue Jesús, ya que lo que ocurrió en el vientre de la virgen María fue un milagro, es a esto a lo que se le llama ¨encarnación¨.

Con respecto a considerar a María como un ser humano sin pecado, la Biblia plantea la universalidad del pecado. Note como dice la Biblia refiriéndose a la culpabilidad del hombre en sentido general: ¨Ciertamente no hay hombre justo en la tierra, que haga el bien y nunca peque¨ (Eclesiastés 7:20). Por esto creemos que por muy buena que haya sido María, la Biblia dice que ella, al igual que todas las personas humanas, era pecadora. La Biblia dice: ¨Como está escrito: No hay justo, ni aun uno¨ (Romanos 3:10). Así que María no se escapa de esta sentencia. La Biblia dice además: ¨por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios¨ (Romanos 3:23), y esto incluye a María, pues no existe ninguna cláusula bíblica que la exceptúe. El único que está claramente excluido en todas estas declaraciones es Jesucristo, porque sí fue concebido sin pecado. Pero todo ser humano normal es concebido en pecado, incluyendo a María.

María no fue elegida por Dios para ser la madre de nuestro Salvador porque ella no tuviera pecado, sino porque halló gracia a los ojos de Dios: ¨Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios¨ (Lucas 1:30). Entiéndase que ¨gracia¨ es un don inmerecido, un regalo de Dios para alguien que no lo merece. María misma lo declara cuando expresa, y lo volvemos a repetir aquí: ¨Porque ha mirado la bajeza de su sierva¨ (Lucas 1:48).

Sólo Jesucristo es sin pecado, él no fue engendrado de voluntad de sangre, ni de voluntad de varón, sino de Dios, tal como son engendrados todos los que creen en él: ¨los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios¨ (Juan 1:13). El ángel le dio estas instrucciones a María cuando ella preguntó cómo podía ella quedar embarazada sin tener contacto con ningún hombre: ¨Entonces María dijo al ángel: ¨¿Cómo será esto? pues no conozco varón. Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios¨ (Lucas 1:34,35).

El libro de hebreos nos declara enfáticamente respecto de Jesucristo que no tuvo pecado: ¨ Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin pecado ¨ (Hebreos 4:15). Pero la Biblia no dice esto de María, ni lo puede decir de ninguna otra persona. Así que la inmaculada concepción de María no es más que un invento de la iglesia católica para justificar el culto a María.

En este punto también debemos hablar de cómo los católicos creen que María es virgen y siempre virgen. Enseñan que María nunca fue mujer de su marido José, y al decir esto están condenando el acto sexual como pecaminoso. Pero la sexualidad es algo hermoso, creado por Dios para la pareja dentro del matrimonio; es malo sólo cuando se hace fuera del matrimonio.

Para justificar que José y María no fueron marido y mujer, enseñan que María no tuvo más hijos. Pero es muy claro en la Biblia que María sí tuvo más hijos. Y fueron muchos hijos los que tuvo esta pareja después que Jesús nació; porque una cosa sí es cierta, José no tocó a María hasta que Jesús nació: ¨Y despertando José del sueño, hizo como el ángel del Señor le había mandado, y recibió a su mujer. Pero no la conoció hasta que dio a luz a su hijo primogénito; y le puso por nombre JESÚS¨ (Mateo 1:24,25). Dice ¨primogénito¨, lo cual indica que tuvo más hijos, de lo contrario hubiera dicho unigénito. Jesús es el unigénito Hijo de Dios, pero el primogénito de María, la cual tuvo muchos hijos más con su querido esposo José, el cual se había casado con ella precisamente porque le gustaba y porque la deseaba como mujer, lo mismo que sucede con todas las parejas del mundo en todos los tiempos. Podemos buscar en la Biblia indicios que demuestran que José y María tuvieron más hijos, por ejemplo veamos este: ¨¿No es éste el hijo del carpintero? ¿No se llama su madre María, y sus hermanos, Jacobo, José, Simón y Judas? ¿No están todas sus hermanas con nosotros? ¿De dónde, pues, tiene éste todas estas cosas?¨ (Mateo 13: 55,56).

Otro asunto que corrobora que María era un ser humano como cualquiera otro, es que ella estaba presente en el aposento alto. Ella formaba parte de los ciento veinte que estaban congregados allí: ¨Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos¨ (Hechos 1:14). María, como todos los demás que estaban allí, los apóstoles y todos los discípulos, no había recibido el Espíritu Santo. Ella, como todos los presentes en el día de pentecostés, recibió por primera vez el Espíritu Santo. Si ella hubiera sido inmaculada hubiera tenido el Espíritu Santo, pero no lo tenía, porque ella, al igual que todos los mortales, necesitaba la salvación que Jesús había provisto, y necesitaba el poder del Espíritu Santo que el Señor había prometido: ¨pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra¨ ( Hechos 1:8).

De esta manera queda claro que María no era inmaculada. Ningún ser humano es inmaculado, sólo Cristo lo es, porque es el Dios hombre.

2.- Los Católicos Creen Que María Es la Madre de Dios.

La Biblia no nos dice que María fue elegida por Dios para hacerla diosa, sino que fue elegida por Dios para él hacerse hombre. Entonces de quien María es la madre es del hombre, no de Dios. Ella fue el receptáculo del ser humano único que es Jesús, pero de ninguna manera se puede inferir por ello que tenga tan grande gracia como de llegar a ser hecha la madre Dios. Como si no fuera suficiente con el hecho de que Dios se haya hecho hombre.

Al decir que María es la madre de Dios, el católico está proclamando la deidad del hombre, pues está haciendo a María diosa. Al decir que María es la madre de Dios, el católico le está concediendo razón a Satanás, el cual había engañado al hombre diciéndole que él podría llegar a ser como Dios: ¨sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal¨ (Génesis 3:5).

Por otro lado, razonemos: ¿Por qué razón querría Dios tener una madre? ¿Acaso el hecho de que Dios se hiciera hombre fue porque él quería tener una madre? ¿Piensan acaso que a Dios le haría falta una madre? Si así fuera, ¿No se la habría provisto de naturaleza sublime e inconcebible por mente humana alguna? Pero el caso es que ese no es el caso, Dios no necesita una madre porque ese concepto de familia es sólo aplicable a los seres humanos, no a Dios. Dios no nos dio una madre porque él quisiera tener una, Dios no hizo al hombre para que esa criatura lograra alguna cosa que él no podía lograr, puesto que esto plantearía la idea de que Dios necesita algo.

La idea católica de hacer a María la madre de Dios no es algo que pueda hallar justificación en la Biblia. Todo esto lo ha hecho el catolicismo con el único propósito de imponer el culto a María como la reina del cielo, como la diosa del universo, para justificar la mediación de María delante de Dios, y para justificar los rezos a María y para justificar la mariolatría.

3.- Los Católicos Creen Que María Se Fue al Cielo en Cuerpo y Alma.

Esto se denomina como la ¨Asunción de María¨. Note que el catolicismo romano le está atribuyendo a María todo lo que le es sólo aplicable a Cristo. La Biblia sí nos dice que Jesucristo se fue al cielo en cuerpo y alma, pero no podemos encontrar nada que nos diga que María se fue al cielo en cuerpo y alma. Eso claramente es un invento para justificar una vez más el culto a María. De esta manera aseguran que ella está en el cielo como co-redentora, cosa esta totalmente absurda o más bien blasfema, desde el punto de vista bíblico.

Nuestra fe debe estar puesta en lo que dice la Biblia, no en lo que dicen los hombres, aunque esos hombres sean los papas o los padres de la iglesia. Nuestra fe no puede estar puesta en la iglesia, aunque esa iglesia sea la iglesia católica. Nuestra fe no puede estar puesta en las tradiciones, sino en la Biblia, esa es nuestra única fuente de autoridad en materia de dogma y de fe cristianos.

Aunque todos tenemos nuestra herencia histórica que respetamos, y hasta nos sentimos gozosos de tenerla, la fe evangélica descansa sólo en la Biblia, la verdad está contenida sólo en la Biblia y emana únicamente de ella. Nuestras tradiciones no pueden rivalizar con la Biblia, sino todo lo contrario, deben estar en armonía con la Palabra de Dios.

Leandro González



Mensaje predicado en la Primera Iglesia Bautista de Mao, República Dominicana, el 24 de Octubre de 2010.

domingo, 17 de octubre de 2010

LA SALVACION POR OBRAS DEL CATOLICISMO ROMANO


Efesios 2:8,9.

¨Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe¨. 

La iglesia católica apostólica y romana, que pretende tener la autoridad de ser la única con una interpretación verdadera de la Biblia, ha reprobado el examen de las Escrituras un millón de veces. Arbitrariamente desea imponer su hegemonía sobre las demás congregaciones cristianas al través de un ecumenismo liderado por ellos mismos.

Se precian de ser la única iglesia verdadera descendiente directa de la sucesión apostólica. Muchos grupos y líderes religiosos hoy le siguen los pasos con la nueva ola apostólica que se ha desatado. Toda la supremacía de la que goza en el mundo la iglesia católica, vista como un poder en la tierra, la ha logrado mediante una autoridad sacerdotal centralizada en los colegios de los obispos con el papa a la cabeza.

La iglesia católica no proclama el exclusivismo de Cristo, ni siquiera el exclusivismo de la religión cristiana, sino el exclusivismo de la iglesia. Y en procura de mantener ese poder vigente, ha hecho todo tipo de maniobras que están recogidas, gracias a Dios,  en los documentos de la historia, aunque esto no es ningún salvoconducto para nadie que le adverse de manera frontal.

Una de las cosas más dañinas para los que han nacido dentro de la fe católica o para los que se hacen católicos es su creencia en la salvación por obras que en esta ocasión queremos tratar de manera muy breve.

El problema del católico con respecto a la salvación por obras es una creencia que forma parte de su tradición, de su sincretismo, más que de sus propias declaraciones de fe. En este sentido veremos tres inconvenientes que presenta esta creencia antibíblica:  

1.- La Salvación por Obras Hace Inválido el Sacrificio de Cristo.

Es por esto el énfasis puesto por la iglesia en la misa, donde se sacrifica de nuevo a Cristo cada vez, cuando la Biblia claramente declara que Jesucristo realizó un solo sacrificio una vez y para siempre, el cual es suficiente. Dejemos que la misma Biblia nos lo diga: ¨En esa voluntad somos santificados mediante la ofrenda del cuerpo de Jesucristo hecha una vez para siempre. Y ciertamente todo sacerdote está día tras día ministrando y ofreciendo muchas veces los mismos sacrificios, que nunca pueden quitar los pecados; pero Cristo, habiendo ofrecido una vez para siempre un solo sacrificio por los pecados, se ha sentado a la diestra de Dios, de ahí en adelante esperando hasta que sus enemigos sean puestos por estrado de sus pies; porque con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los santificados¨ (Hebreos 10:10-14). 

Es una blasfemia tan siquiera suponer que la obra de Cristo está inconclusa y que las personas tienen que hacer algo para ser salvas.  El apóstol Pablo enfrentó esta barbaridad muy temprano en la iglesia primitiva, cuando amonestaba a los gálatas, los cuales menospreciaban la gracia de Dios como lo hacen los católicos hoy: ¨No desecho la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo¨ (Gálatas 2:21). Este era un tema sobremanera claro y maduro en la mente de los apóstoles, el asunto de que la salvación es sólo por la gracia de Dios: ¨Y si por gracia, ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si por obras, ya no es gracia; de otra manera la obra ya no es obra¨ (Romanos 11:6).

En su desatino, la iglesia católica pone el énfasis en el lugar equivocado, al hacer que la eucaristía signifique, según ellos, que el cuerpo y la sangre de Jesucristo están presentes literalmente en los elementos de la cena conmemorativa, el pan y el vino, que es a lo que se le llama en teología la transustanciación.

2.- La Salvación por Obras Presupone algún Mérito del Hombre.

Esto significa que la persona merece o puede llegar a merecer en algún momento de su vida la salvación. Pero más sutilmente significa que el hombre hace alguna cosa para ser salvo, cuando en realidad es Dios quien lo hace todo desde el principio hasta el final: ¨Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad¨ (Filipenses 2:13).

No podemos confundir el concepto de la ¨sola gratia¨  con el criterio de Santiago de que la fe sin obras es muerta, pues Santiago está hablando de una fe práctica o de la práctica de la fe. Santiago habla de cómo nuestra vida debe evidenciar en la cotidianidad nuestra fe en Dios, de cómo nuestra conducta debe estar de acuerdo con lo que decimos creer. Y con esto estamos de acuerdo, porque también nuestro Señor Jesucristo está de acuerdo cuando dice: ¨No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. Así que, por sus frutos los conoceréis. No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos¨ (Mateo 7:18-21).

Pero la salvación es algo que sólo depende de Dios, es una obra de Dios, no depende del hombre. Si algo depende absolutamente de nosotros es la muerte y la condenación eterna: ¨Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios¨ ( Romanos 3:23). Ningún ser humano escapa a la universalidad de esta sentencia; sólo Cristo está exceptuado por cuanto es el único ser humano sin pecado, y esta es una de las razones porqué nos puede salvar: ¨Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu¨ (I Pedro 3:18).

La reforma protestante obedeció precisamente al hecho de que Martín Lutero, un fraile católico de Alemania, se había percatado por su lectura seria de la Biblia, que la salvación es por la fe sola, y que era inmoral y abusivo que la iglesia estuviera ofreciéndole a cambio de dinero a los feligreses, por medio de un decreto o bula papal, la indulgencia o perdón de sus pecados, cosa que sólo Jesucristo puede otorgar. Lutero enfrentó el poder de la iglesia católica a la que él pertenecía, a riesgo de perder su propia vida. Pasó de ser un miembro de la cúpula sacerdotal, a ser un insignificante laico al que le fueron suprimidos todos los derechos civiles, declarándole así como un enemigo peligroso para el gobierno absolutista  de la iglesia, que era y sigue siendo un poder político, con el papa a la cabeza, creyéndose infalible.

El Papa se cree heredero de una sucesión apostólica, la de Pedro, el principal de los doce. Pero se sabe que esta sucesión no tiene asidero bíblico. Porque la iglesia católica, a pesar de tener la Biblia inspirada, se aferra más a su tradición romana de hegemonía imperial, que a lo que la Biblia establece. Porque para el católico tiene más valor lo que dicen los hombres que lo que dice Dios, y por ello esta iglesia no dejará de sufrir grandes cismas dentro de ella, hasta que se consiga definitivamente sacarla del círculo humanista en el que está aprisionada por las ambiciones de los hombres. En esa iglesia no reina Dios, sino los designios de los colegios obispales que determinan la filosofía y política de la misma, para mantener su poder en el mundo, inmiscuyéndose de manera imprudente en todos los asuntos de Estado de los gobiernos de la tierra.

Para el teólogo católico es mucho más importante la filosofía y la política que la Biblia. Ellos se empeñan más en conocer y dominar las ideas de los grandes pensadores humanos, que en escudriñar las verdades eternas de Dios, contenidas en las Sagradas Escrituras. Aunque los católicos tienen los libros apócrifos incluidos en su Biblia, la Biblia de ellos es la misma que la de los evangélicos, así que no tendrán excusa delante de Dios los que valoran más las teorías de los llamados padres de la iglesia y a la iglesia misma, por encima de la Palabra de Dios. Este menosprecio a la Palabra de Dios está en contra de lo que el propio Pedro creía: ¨Mas Pedro y Juan respondieron diciéndoles: Juzgad si es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios; porque no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído¨ (Hechos 4:19,20). 

La iglesia católica es antropocéntrica, no teocéntrica, y esto se demuestra en todas sus instituciones. Esta condición es lo que ha provocado siempre los grandes cambios y transformaciones que se han suscitado dentro de ella. El interés de la iglesia católica no es el interés de Dios. Esto me recuerda lo que el Señor le dijo a Pedro cuando trataba de convencerle de no morir: ¨Entonces Pedro, tomándolo aparte, comenzó a reconvenirle, diciendo: Señor, ten compasión de ti; en ninguna manera esto te acontezca. Pero él, volviéndose, dijo a Pedro: ¡Quítate de delante de mí, Satanás!; me eres tropiezo, porque no pones la mira en las cosas de Dios, sino en las de los hombres¨ (Mateo 16:22,23). Jesucristo murió en la cruz para que los hombres se vuelvan a Dios, y la iglesia católica quiere hacer lo contrario, ella quiere que los hombres se fijen en el hombre que está en el trono del vaticano, y no les importa que con ello los hombres desvíen su mirada de Dios. Para ellos son más importantes las encíclicas papales que la Palabra de Dios.

3.- La Salvación por Obras Contradice la Gracia de Dios.

La salvación es una asunto que compete sólo a Dios. Es sólo Dios el que se ha planteado la salvación del hombre pecador, y es sólo él el que puede salvar, pues la salvación es un don que sólo Dios puede otorgar a todos aquellos que creen en Jesucristo: ¨Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna¨ (Juan 3:16).

Ningún hombre, ninguna iglesia, ninguna religión, ni ninguna fuerza de ninguna clase y de ninguna parte pueden salvar al hombre. Sólo Cristo puede salvar. Esta es una verdad muy bien declarada por los apóstoles, para que no haya duda alguna al respecto: ¨y poniéndoles en medio, les preguntaron: ¿Con qué potestad, o en qué nombre, habéis hecho vosotros esto? Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les dijo: Gobernantes del pueblo, y ancianos de Israel: Puesto que hoy se nos interroga acerca del beneficio hecho a un hombre enfermo, de qué manera éste haya sido sanado, sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de los muertos, por él este hombre está en vuestra presencia sano. Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo. Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos¨ (Hechos 4:7-12). 

Con la salvación no se puede negociar, como lo hace la iglesia católica cada vez que le vende a sus feligreses la idea de que con letanías, misas de descanso eterno y responsos, se puede sacar de pena al difunto para llevarlo a descansar. La iglesia se presenta con poderes y autoridad que no tiene, y de esta manera ofrece falsas esperanzas a los deudos desesperados. Jesucristo mismo ha dicho: ¨De cierto, de cierto os digo: El que no entra por la puerta en el redil de las ovejas, sino que sube por otra parte, ése es ladrón y salteador¨ (Juan 10:1). Jesús es la puerta, no es Pedro, no es Pablo, no es María, no es la iglesia.

La salvación no es para los que nacen en una iglesia o se hacen parte de ella por el bautismo, la salvación es para todos aquellos que creen en Jesucristo de todo su corazón. El énfasis de toda la Biblia está puesto en una sola persona, Jesucristo: ¨Mas a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios; los cuales no son engendrados de sangre, ni de voluntad de carne, ni de voluntad de varón, sino de Dios¨ (Juan 1:12,13). 

En Jesucristo y no en la iglesia u otra persona o cosa está puesta la gracia de Dios que salva al pecador. Entonces no pongamos la atención en otra parte.


Leandro González

Mensaje predicado en la Primera Iglesia Bautista de Mao, República Dominicana, el 17 de octubre de 2010.

viernes, 15 de octubre de 2010

EL INFIERNO

Mateo 10: 28


¨Y no temáis a los que matan el cuerpo, mas el alma no pueden matar; temed más bien a aquel que puede destruir el alma y el cuerpo en el infierno¨.

El cielo fue creado con mucho amor y el infierno con mucho dolor. Dios disfrutó la creación del cielo, no así la creación del infierno.

Algunas sectas equivocadamente enseñan que el infierno no existe, o en su defecto, enseñan que no será un lugar de tormento eterno, sino que será un lugar donde las personas serán aniquiladas. Argumentan que no es posible que un Dios de amor haya creado un lugar tan horrible. Estos olvidan que así como Dios es amor, también es justicia, es por esto que se nos manda a ser reverentes ante él: ¨Así que, recibiendo nosotros un reino inconmovible, tengamos gratitud, y mediante ella sirvamos a Dios agradándole con temor y reverencia; porque nuestro Dios es fuego consumidor¨ (Hebreos 12: 28,29). Por lo general quienes razonan respecto del amor de Dios de esta manera, pasan por alto su justicia, y detestan tocar el tema de la ira de Dios, una cosa tan obvia en toda la Biblia desde el Génesis hasta el Apocalipsis.

Los universalistas proclaman que puesto que al fin de cuentas todos los hombres serán salvos, el infierno no tiene razón de ser. Los restauracionistas plantean que la muerte produce en el hombre un cambio de carácter que le hace volverse de sus pecados, y que esto le brinda la oportunidad de restauración de su condición, y después de ser purificados, van al cielo. Pero la Palabra de Dios nos dice otra cosa muy distinta: ¨Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el juicio¨ (Hebreos 9:27). De acuerdo a este versículo el hombre sólo tiene una oportunidad, la que se le ofrece en vida, y debe aprovecharla.

Los que van a estar en el infierno sabrán que su castigo es merecido y que eso era lo mejor que Dios podía hacer con ellos. Por causa de su soberanía en infalibilidad nadie puede cuestionar a Dios, ya que él siempre actúa rectamente: ¨Porque el nombre de Jehová proclamaré. Engrandeced a nuestro Dios. El es la Roca, cuya obra es perfecta, Porque todos sus caminos son rectitud; Dios de verdad, y sin ninguna iniquidad en él; Es justo y recto. La corrupción no es suya; de sus hijos es la mancha, Generación torcida y perversa. ¿Así pagáis a Jehová, Pueblo loco e ignorante? ¿No es él tu padre que te creó? El te hizo y te estableció¨ (Deuteronomio 32:3-6).

Uno pensaría que no podría haber en el mundo ninguna persona que deseara ir al infierno, pero no, existen algunos que sí están gustosos con ir a ese lugar, y están esperando el día en que estarán allí, y hasta hacen chiste con ello; naturalmente que ellos piensan así porque ignoran absolutamente lo terrible que es el infierno.

Pero no se asombre demasiado, pues la mayoría de la gente de este mundo vive como si fueran a ir al infierno, no como si fueran a ir al cielo. Es más, algunos cristianos no parecen estar muy entusiasmados con la idea de ir al cielo, pues están tan acostumbrados a este mundo que hasta piensan que sería bueno quedarse en él para siempre, y este frenesí descuidan tanto su vida devocional que hasta parecerían ser candidatos para el infierno, no para el cielo.

Esta actitud frente a lo irreversible de la eternidad es por desconocimiento. Muchos ignoran lo que en realidad es el infierno. Muchos ignoran las terribles presiones que se experimentarán allí y lo desesperante que será estar confinado a esta prisión por los siglos de los siglos. Si es terrible estar preso, aun en condiciones adecuadas, ¡Imagínese lo que será el infierno! En el libro de Job encontramos referencia que nos habla del infierno como una cárcel: ¨Si él derriba, no hay quien edifique; Encerrará al hombre, y no habrá quien le abra¨ Job 12:14). También vemos la misma idea expresada por el apóstol Pedro al hablar del castigo de los ángeles caídos: ¨Porque si Dios no perdonó a los ángeles que pecaron, sino que arrojándolos al infierno los entregó a prisiones de oscuridad, para ser reservados al juicio¨ (2 Pedro 2:4). Pero solamente el hecho de estar acompañado por siempre de las huestes espirituales de maldad, es suficiente para que el infierno sea algo insoportable.

En vista de todo esto, toquemos los siguientes puntos que son pertinentes con relación a este tema:

1.- El Infierno es un Lugar Real.

El infierno no es un estado mental, no es solamente una condición, sino que es un lugar real. El Señor Jesús se refirió a él como un lugar geográfico específico: ¨Por tanto, si tu mano o tu pie te es ocasión de caer, córtalo y échalo de ti; mejor te es entrar en la vida cojo o manco, que teniendo dos manos o dos pies ser echado en el fuego eterno. Y si tu ojo te es ocasión de caer, sácalo y échalo de ti; mejor te es entrar con un solo ojo en la vida, que teniendo dos ojos ser echado en el infierno de fuego¨ (Mateo 18: 8,9).

El infierno no está en la tierra como muchos dicen cuando pasan por dificultades. Y decimos que si las situaciones incómodas que pasamos en la tierra a muchos les parece el infierno, entonces ¿qué será el mismo infierno? Algunos que son adoradores de Satanás también piensan que ellos se podrán adaptar al infierno, pues están conscientes que es a ese lugar al que ellos irán juntamente con Satanás y sus demonios. Pero esta es una forma como Satanás los engaña, pues el infierno no es un lugar a donde nadie va a ir por su propia cuenta, sino porque serán echados allí. Y ni siquiera Satanás estará a gusto en ese lugar, sino que él también será atormentado: ¨serán echados a las tinieblas de afuera; allí será el lloro y el crujir de dientes¨ (Mateo 8:12).

El infierno fue hecho para el diablo y sus ángeles, no para los hombres: ¨Entonces dirá también a los de la izquierda: Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el diablo y sus ángeles¨ (Mateo 25:41). Pero se irán allí los que rechacen la salvación que sólo Jesucristo puede dar.

El infierno es un lugar terrible. No hay un lugar más terrible que este, porque es el único lugar donde Dios no está. El Señor Jesús utilizó como símil del infierno el basurero fuera de la ciudad de Jerusalén, que identifica el valle de Hinom de 2 Crónicas 28:3 donde los niños eran sacrificados a Moloc: ¨Quemó también incienso en el valle de los hijos de Hinom, e hizo pasar a sus hijos por fuego, conforme a las abominaciones de las naciones que Jehová había arrojado de la presencia de los hijos de Israel¨. En este lugar denominado gehenna, había un fuego constante e inextinguible donde la porquería era quemada. Entonces, el infierno es un lugar de constante angustia y desesperación, que no tiene ni un instante de sosiego. Por eso la Biblia lo denomina como un lugar de tormento eterno: ¨Su aventador está en su mano, y limpiará su era; y recogerá su trigo en el granero, y quemará la paja en fuego que nunca se apagarᨠ(Mateo 3:12). Esto se refiere a las llamas del infierno, y son llamas reales. Y es muy posible que no sean como las llamas que nosotros estamos acostumbrados a ver, sino que es algo indescriptible. Estas llamas no solo atormentan el cuerpo, sino también el alma.

El infierno es un lugar tan real, que no deberíamos pasarlo por alto en ningún momento.

2.- El Infierno es el Unico Destino de los Perdidos.

No hay lugares intermedios, como el limbo o el purgatorio. El limbo es descrito como un estado indefinido, ni se está en el cielo, ni se está en el infierno. Es además descrito como un lugar donde los seres humanos que mueren están en un estado nebuloso de absoluta inconsciencia. Pero la descripción de este supuesto lugar no cuadra con lo que vemos relatado en la Biblia, pues las personas que mueren, sean incrédulos o creyentes, son conscientes de su existencia en el más allá. En la historia del rico y Lázaro narrada por Jesús, vemos que tanto el rico que estaba en el hades, así como Lázaro que estaba en el cielo, eran conscientes de su existencia (Lucas 16:19-31). Además Jesús se refirió a personajes de la antigüedad que estaban muertos, como que estaban vivos en el cielo: ¨Pero en cuanto a que los muertos han de resucitar, aun Moisés lo enseñó en el pasaje de la zarza, cuando llama al Señor, Dios de Abraham, Dios de Isaac y Dios de Jacob. Porque Dios no es Dios de muertos, sino de vivos, pues para él todos viven¨ (Lucas 20:37,38).

El purgatorio es descrito como un lugar a donde van las almas una vez que han muerto, para supuestamente ser purificadas, de modo que puedan salvar los obstáculos que le impiden entrar al cielo. Pero nada de esto está en la Biblia. Si una persona no se arrepiente en vida, no es posible hacer nada para salvarle. La Biblia establece que la fe en Jesucristo es lo único que salva y libra del infierno eterno. Y esto es algo que se debe hacer en este mundo, antes de morir: ¨sea notorio a todos vosotros, y a todo el pueblo de Israel, que en el nombre de Jesucristo de Nazaret, a quien vosotros crucificasteis y a quien Dios resucitó de los muertos, por él este hombre está en vuestra presencia sano. Este Jesús es la piedra reprobada por vosotros los edificadores, la cual ha venido a ser cabeza del ángulo. Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos¨ (Hechos 4: 10-12). La única manera que una persona tiene para ser salvo es la que Dios ya ha establecido y que constituye la piedra angular de la fe, que solamente en Cristo hay salvación.

El purgatorio es un invento de los hombres, es una idea novelesca de Dante Alighieri en ¨La Divina Comedia¨, pero el infierno es realidad, una realidad a la que no deberías enfrentarte.

El infierno es el otro extremo, es la antítesis del cielo: ¨E irán éstos al castigo eterno, y los justos a la vida eterna¨ (Mateo 25:46). En el libro de Job tenemos una descripción de este lugar definido como la morada de los impíos: ¨Porque red será echada a sus pies, y sobre mallas andará. Lazo prenderá su calcañar; se afirmará la trampa contra él. Su cuerda está escondida en la tierra, y una trampa le aguarda en la senda. De todas partes lo asombrarán temores, y le harán huir desconcertado. Serán gastadas de hambre sus fuerzas, y a su lado estará preparado quebrantamiento. La enfermedad roerá su piel, y a sus miembros devorará el primogénito de la muerte. Su confianza será arrancada de su tienda, y al rey de los espantos será conducido. En su tienda morará como si no fuese suya; piedra de azufre será esparcida sobre su morada. Abajo se secarán sus raíces, y arriba serán cortadas sus ramas. Su memoria perecerá de la tierra, y no tendrá nombre por las calles. De la luz será lanzado a las tinieblas, y echado fuera del mundo. No tendrá hijo ni nieto en su pueblo, ni quien le suceda en sus moradas. Sobre su día se espantarán los de occidente, y pavor caerá sobre los de oriente. Ciertamente tales son las moradas del impío, y este será el lugar del que no conoció a Dios¨ (Job 18:8-21).

3.- El Infierno es Eterno.

El infierno es para siempre, Castigo eterno: ¨Y el tercer ángel los siguió, diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y a su imagen, y recibe la marca en su frente o en su mano, él también beberá del vino de la ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz de su ira; y será atormentado con fuego y azufre delante de los santos ángeles y del Cordero; y el humo de su tormento sube por los siglos de los siglos. Y no tienen reposo de día ni de noche los que adoran a la bestia y a su imagen, ni nadie que reciba la marca de su nombre¨ (Apocalipsis 14: 9-11). Es un lugar de tormento eterno.

No es aniquilación como enseñan los adventistas y los llamados testigos de Jehová.

El infierno es la muerte segunda: ¨El que tiene oído, oiga lo que el Espíritu dice a las iglesias. El que venciere, no sufrirá daño de la segunda muerte¨ (Apocalipsis 2:20). ¨Pero los cobardes e incrédulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los idólatras y todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que es la muerte segunda¨ (Apocalipsis 21:8). La muerte segunda es lo contrario de la muerte física, es la separación eterna de Dios, eso es lo que es el infierno. En este lugar se ha perdido toda esperanza de salvación.

El infierno es muerte eterna, lo contrario de la vida eterna.

Leandro González

Mensaje predicado en la Primera Iglesia Bautista de Mao, República Dominicana, el 10 de Octubre de 2010.

martes, 12 de octubre de 2010

SATANAS


Apocalipsis 12:9

¨Y fue lanzado fuera el gran dragón, la serpiente antigua, que se llama diablo y Satanás, el cual engaña al mundo entero; fue arrojado a la tierra, y sus ángeles fueron arrojados con él¨. 

Satanás parece haber sido el principal entre sus iguales, los ángeles. Existen pasajes bíblicos que parecen hablarnos de la dignidad que en el principio tenía Lucifer o Luzbel, que significa ¨lucero de la mañana¨, que era su nombre original; pero que fue transformado de pronto en Satanás, del término hebreo ¨Shatan¨, que quiere decir ¨el adversario¨ o ¨enemigo¨, el que se opone a Dios y a sus criaturas. En este sentido podemos mirar en Isaías 14:12-14 donde parece narrarse la manera como ocurrió su caída: ¨¡Cómo caíste del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones. Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo¨. 

Este ángel se volvió perverso. Se desvaneció toda la integridad con que Dios lo había creado. Su pecado fue el orgullo, de manera específica el egocentrismo, y por esto se volvió soberbio. En la referencia que hace el profeta Ezequiel al rey de Tiro, parece darnos detalles de lo que provocó la ruina de este ángel en rebelión. En este pasaje se lo nombra como ¨querubín protector¨: ¨Hijo de hombre, levanta endechas sobre el rey de Tiro, y dile: Así ha dicho Jehová el Señor: Tú eras el sello de la perfección, lleno de sabiduría, y acabado de hermosura. En Edén, en el huerto de Dios estuviste; de toda piedra preciosa era tu vestidura; de cornerina, topacio, jaspe, crisólito, berilo y ónice; de zafiro, carbunclo, esmeralda y oro; los primores de tus tamboriles y flautas estuvieron preparados para ti en el día de tu creación. Tú, querubín grande, protector, yo te puse en el santo monte de Dios, allí estuviste; en medio de las piedras de fuego te paseabas.  Perfecto eras en todos tus caminos desde el día que fuiste creado, hasta que se halló en ti maldad. A causa de la multitud de tus contrataciones fuiste lleno de iniquidad, y pecaste; por lo que yo te eché del monte de Dios, y te arrojé de entre las piedras del fuego, oh querubín protector. Se enalteció tu corazón a causa de tu hermosura, corrompiste tu sabiduría a causa de tu esplendor; yo te arrojaré por tierra; delante de los reyes te pondré para que miren en ti. Con la multitud de tus maldades y con la iniquidad de tus contrataciones profanaste tu santuario; yo, pues, saqué fuego de en medio de ti, el cual te consumió, y te puse en ceniza sobre la tierra a los ojos de todos los que te miran. Todos los que te conocieron de entre los pueblos se maravillarán sobre ti; espanto serás, y para siempre dejarás de ser¨ (Ezequiel 28: 12-19).

Hablemos primero de:

1.- Cómo Satanás se volvió Satanás.

Según la descripción que vemos en el pasaje anterior, Satanás era un ángel creado que gozaba de toda la confianza y aprecio departe de Dios. Pero él quiso apropiarse del trono de su Creador, se olvidó de toda prudencia. Su deseo de ser igual que Dios dominó toda su voluntad, esa fue la locura de su propia tentación. Por esta causa podemos decir que el diablo es el enemigo de él mismo, puesto que provocó su propia ruina. Pero no estaba solo en su pretensión, fueron muchos los complotados, tantos que no se sabe la cuenta. Los demonios son sus compañeros de perdición.

Satanás, al rebelarse contra Dios, dio inicio al pecado. Satanás se sublevó, porque como los demás ángeles, tenía voluntad propia, de otra manera no hubiera podido hacer lo contrario de lo que Dios había determinado para él.

Es irreversible el estado condenatorio de Satanás. Ni él ni los ángeles que le siguieron tienen ninguna posibilidad de salvación. Satanás tomó una decisión que le perjudicó. Las decisiones que tomamos nos pueden edificar o nos pueden destruir. Debemos medir las consecuencias de nuestros actos. Satanás despreció el reino de la luz en donde él vivía y al que él pertenecía, lo cambió por el reino de las tinieblas. El prefería ser el emperador del mal, antes que ser uno más en el reino del bien.

Una persona no puede decidir ser malo, y continuar siendo bueno. Precisamente, el gran pecado de Satanás estuvo en que siendo hecho de toda bondad, fue hallada en él maldad. El es el engendro de su propia perversión. Siendo hecho perfectamente bueno, él mismo se convirtió en alguien perfectamente malo. Se hizo incapaz de soportar toda la bondad que Dios había depositado en él.

Los ángeles fueron hechos espíritus puros, con la misión de asistir a su Creador en el estado más privilegiado que ser alguno pudiera disfrutar jamás. Entonces Satanás fue su propio seductor, y de esta manera se convirtió en el padre de todo engaño, porque fue capaz de creerse su propia mentira. En este sentido Satanás es víctima de su propio error. Satanás es el primer victimario y su primera propia víctima.

Satanás perdió algo que no recuperará Jamás: Su comunión con Dios.

Satanás, con su ejército de tinieblas, es el individuo malo y poderoso más peligroso. Yendo y viniendo de las entrañas de las ¨tienieblas de afuera¨, el confinamiento al que Dios lo arrojó junto a sus compañeros, Satanás se mueve en su reino espectral, actuando siempre en las sombras, que es su ámbito: lo escondido, lo oculto.

Satanás no pierde tiempo para inflar con sus ínfulas a cualquiera que se cruce en su camino, y hasta al que no se le cruce, porque él no pierde tiempo.

Pero el diablo no salió del paraíso por su propia cuenta. Una gran batalla se tiene que haber dado lugar en el cielo para expulsarlo de allí. Esta tiene que haber sido la primera gran batalla cósmica y el inicio de la guerra entre el bien y el mal. Pero es evidente que el mal fue vencido por el bien, y así se marcó el destino de Satanás y la definitiva derrota del mal. Y esto es muy bueno, porque  significa que siempre el bien triunfará sobre el mal.

Veamos ahora,

2.- Como Satanás Se Ha Comportado a lo Largo de la Historia.

Primeramente veamos cómo Satanás ha actuado en la caída del hombre. En Génesis 3 vemos la narración de este fatídico acontecimiento. El propósito de Satanás es destruir la obra tan hermosa que Dios ha hecho: ¨El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir¨ (Juan 10:10). Mientras Dios construye, Satanás va detrás tratando de destruir, eso es algo que vemos a diario en personas que muestran con sus actos la misma tendencia destructiva del enemigo. Es triste ver el panorama de lo ocurrido en el jardín del Edén, Adán y Eva le hicieron caso a Satanás, y desoyeron la voz de Dios. Cuando dejamos que Satanás mine nuestra casa, es seguro que descuidaremos nuestra relación con Dios. Debemos aprender a decirle a Satanás como le dijo Jesús: ¨Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está: Al Señor tu Dios adorarás, y a él sólo servirás¨ (Mateo 4:10).

En segundo lugar veamos cómo Satanás ha actuado en los intentos para evitar la restauración del hombre. Desde que el hombre pecó, Dios dejó establecido que un día el hombre sería restaurado. En el mismo lugar donde el hombre pecó, allí mismo estableció la manera como vendría la salvación a la humanidad: ¨Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar¨ (Génesis 3:15). Este versículo claramente nos habla de la obra salvífica de Jesucristo. Satanás intentó por todos los medios evitar que esta profecía se cumpliera, pero es evidente que no pudo lograr su propósito, pues Jesús vino a este mundo mediante la encarnación para ser el salvador de todo aquel que en él cree: ¨Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna¨ (Juan 3:16).

Y finalmente echemos un vistazo a la manera cómo Satanás fue derrotado definitivamente en el Calvario. El último gran intento de Satanás de frustrar la obra salvadora de Dios ocurrió en el jardín de Getsemaní. Allí en aquel lugar Jesús sufría por todo el peso del mundo puesto sobre él. Por este motivo ora al Padre: ¨Otra vez fue, y oró por segunda vez, diciendo: Padre mío, si no puede pasar de mí esta copa sin que yo la beba, hágase tu voluntad¨ (Mateo 26:42). Pero Jesús fue al Calvario y dio su vida por todos los pecadores, murió en una cruz para vencer con su muerte la condena por el pecado, murió por todos, en lugar de todos. Es por esto que cada uno debe creer en él para ser salvo del pecado, de la muerte, del infierno y de Satanás: ¨Y cuando esto corruptible se haya vestido de incorrupción, y esto mortal se haya vestido de inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita: Sorbida es la muerte en victoria. ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria? ya que el aguijón de la muerte es el pecado, y el poder del pecado, la ley. Mas gracias sean dadas a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo¨ (I Corintios 15:54-57). 

Por eso, es bueno que veamos:

3.- Cómo Satanás Ya No Es Una Amenaza Para el Cristiano.

Con relación a este tema debemos saber que Satanás no tiene poder sobre tu vida, si te sometes constantemente al dominio de Cristo y luchas con la armadura de Dios que está descrita en Efesios 6: 13-18: ¨Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiendo acabado todo, estar firmes. Estad, pues, firmes, ceñidos vuestros lomos con la verdad, y vestidos con la coraza de justicia, y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz. Sobre todo, tomad el escudo de la fe, con que podáis apagar todos los dardos de fuego del maligno. Y tomad el yelmo de la salvación, y la espada del Espíritu, que es la palabra de Dios; orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos¨.

Es imposible que Satanás o los demonios puedan tomar posesión de un cristiano, pues la Biblia dice: ¨¿Y qué concordia Cristo con Belial? ¿O qué parte el creyente con el incrédulo? ¿Y qué acuerdo hay entre el templo de Dios y los ídolos? Porque vosotros sois el templo del Dios viviente, como Dios dijo: Habitaré y andaré entre ellos, Y seré su Dios,Y ellos serán mi pueblo¨ (2 Corintios 6:15-16). 

Con la victoria de Jesucristo en el Calvario, la Biblia nos dice que somos más que vencedores. Lo que tenemos que hacer es lo que nos dice Santiago: ¨Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, y huirá de vosotros¨ (Santiago 4:7).

La Resurrección de Jesucristo despejó toda incertidumbre y garantiza la victoria sobre Satanás, verdaderamente él es el único que puede salvar al pecador.  

Satanás es todo lo contrario de lo que es Jesucristo: Teniendo razones para despreciarnos, Jesucristo es nuestro amigo, Satanás, sin razón es nuestro enemigo. Teniendo motivos de sobra para acusarnos, Jesucristo se convierte en  nuestro abogado, pero Satanás es nuestro acusador sin causa. Jesucristo nos dice: ¨yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia¨ (Juan 10:10). ¡Gracias Señor por redimirnos del secuestro de Satanás!

Leandro González

Mensaje predicado en la Primera Iglesia Bautista de Mao, República Dominicana, el 10 de Octubre de 2010.

domingo, 3 de octubre de 2010

LOS ANGELES


Hebreos 1:13,14.

¨Pues, ¿a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Siéntate a mi diestra, Hasta que ponga a tus enemigos por estrado de tus pies? ¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?¨

Es mucho lo que podemos hablar del accionar de los ángeles, pues aparecen en el relato bíblico desde el principio hasta el final. Los ángeles jugarán un papel muy bien definido y decisivo en la segunda venida de Cristo. Pero es muy poco lo que la Biblia nos habla acerca de su origen. Tengamos en cuenta que la Biblia es un libro escrito para el hombre, habla del hombre y su relación con Dios, y abarca el tema de los ángeles por la intermediación de los mismos como mensajeros de Dios a favor o en contra de los hombres, según sea el caso.

En el día de hoy muchas personas tienen una idea equivocada acerca de los ángeles, y algunos grupos religiosos ponen un énfasis desmedido en estos seres, otorgándole una atención que puede llegar a ser peligrosa. La Biblia claramente nos advierte acerca de la habilidad de Satanás para presentarse como un ángel del cielo: ¨Y no es maravilla, porque el mismo Satanás se disfraza como ángel de luz¨ (2 Corintios 11: 14).

El negocio de los espiritistas, de los astrólogos, y de los boticarios es muy lucrativo cuando se habla de ángeles. Además existen tiendas especializadas en la comercialización de figuras de ángeles en todo tipo de material y en cualquier formato o tamaño, tanto para decorar la casa como para  llamar la suerte o sentirse resguardados por ellos. Dios es quien ha dotado al artista de su ingenio, pero el artista no glorifica a Dios cuando presta su talento para incentivar el cultivo de la adoración a los ángeles por medio de sus creaciones pintadas o esculpidas.

Si bien es cierto que los ángeles juegan un papel importante en la protección y cuidado de los hijos de Dios, pero cuando la Biblia se refiere a ellos, se está refiriendo a los ángeles de verdad, no a las figuras hechas por el hombre. Además, los ángeles no actúan por su propia cuenta, ni se les debe invocar, pues al único que debemos orar es a Dios en el nombre de Jesús: ¨En aquel día no me preguntaréis nada. De cierto, de cierto os digo, que todo cuanto pidiereis al Padre en mi nombre, os lo darᨠ(Juan 16:23). La oración modelo que Jesús enseñó a sus discípulos nos muestra que la oración se debe dirigir siempre y únicamente al Padre: ¨Vosotros, pues, oraréis así: Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea tu nombre. Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra. El pan nuestro de cada día, dánoslo hoy. Y perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores. Y no nos metas en tentación, mas líbranos del mal; porque tuyo es el reino, y el poder, y la gloria, por todos los siglos. Amén¨ (Mateo 6:9-13).

Entonces podemos decir que es un pecado orar a los ángeles o a cualquiera otra persona o cosa. Se comete el pecado grave de idolatría cuando se ofrece culto a los ángeles, como es el caso de la celebración muy popular en nuestro país República Dominicana, donde la gente rinde culto a ¨san miguel¨. La Biblia es muy enfática en contra de esta práctica: ¨Nadie os prive de vuestro premio, afectando humildad y culto a los ángeles" (Colosenses 2:18).

Con relación a este tema de los ángeles, veremos tres cosas:

1.- Origen de los Angeles.

Queremos tener cuidado, al hablar del origen de los ángeles, de no entrar en conjeturas. Aunque con relación al tema de Satanás y su caída, tema que abarcaremos en nuestro próximo sermón, es muy posible que tengamos que entrar en ciertas especulaciones y pensamientos o criterios muy personales para poder explicar ciertas cosas.

Lo primero que podemos saber acerca del origen de los ángeles es que no han existido siempre, pues son parte de la creación de Dios: ¨Porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él es antes de todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten¨ (colosenses 1:16,17). De acuerdo a este pasaje los ángeles son propiedad de Jesucristo, le pertenecen a él y deben obediencia a él, pues fueron creados ¨por él y para él¨, este es uno de los grandes motivos porqué los demonios se le tiene que sujetar.

Naturalmente que no podemos saber cuándo con exactitud fueron creados los ángeles, pero sí podemos darnos cuenta por lo que nos dice la Biblia que los ángeles estaban presentes en algún momento de la creación, pues leemos en Job 38: 4-7: ¨¿Dónde estabas tú cuando yo fundaba la tierra? Házmelo saber, si tienes inteligencia.  ¿Quién ordenó sus medidas, si lo sabes? ¿O quién extendió sobre ella cordel? ¿Sobre qué están fundadas sus bases? ¿O quién puso su piedra angular, Cuando alababan todas las estrellas del alba, Y se regocijaban todos los hijos de Dios?¨. Pero es muy claro en la Biblia que los ángeles fueron creados primero que los hombres. 

Los ángeles son asexuales, no se reproducen como los humanos, pero son tantos que son incontables, podríamos decir que son como las estrellas de los cielos, millones de millones, y conforman el ejército de Dios. A esto se refirió Jesús cuando dijo: ¨¿Acaso piensas que no puedo ahora orar a mi Padre, y que él no me daría más de doce legiones de ángeles?¨ (Mateo 26:53). 

Los ángeles son espíritus, no tienen cuerpo físico como los hombres, pero se pueden materializar y hacerse visibles y hasta tangibles, recordemos la lucha de Jacob con el ángel en Peniel (Génesis 32:24-30).

2.- Los Santos Angeles.

La palabra ángel viene del griego γγελος, y significa mensajero. Muchas veces en la escritura se usa esta misma palabra para referirse a personas humanas que hacen las veces de profetas o mensajeros de Dios, como es el caso de los ángeles de las iglesias en el libro de Apocalipsis, donde se refiere a los pastores de esas iglesias: ¨Escribe al ángel de la iglesia en Efeso¨ (Apocalipsis 2:1). Pero los ángeles en sí son un tipo de mensajero muy especial, pues son mensajeros, ministradores de Dios: ¨¿No son todos espíritus ministradores, enviados para servicio a favor de los que serán herederos de la salvación?¨ (Hebreos 1:14). En este sentido han sido usados como intermediarios entre Dios y los hombres, en el sentido que han traído a la humanidad mensajes departe de Dios, como es el caso del ángel Gabriel que fue enviado a María: ¨Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María¨ (Lucas 1:26,27).

Estos santos ángeles son los que según su propia voluntad permanecen fieles a Dios, contrario a los demonios, que son los ángeles caídos que siguieron a Satanás en su rebelión contra Dios. Los santos ángeles decidieron permanecer firmes en su lealtad a su Creador reconociéndolo como su Comandante en Jefe. Existe entonces una gran lucha permanente en el mundo invisible de los espíritus angelicales, cruentas batallas se libran entre los ángeles de Dios y los ángeles de Satanás. Así que muchas situaciones que ocurren en la tierra, se lidian primero en el mundo espiritual. Por eso el apóstol Pablo nos exhorta a estar conscientes de esta realidad : ¨ Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes¨ (Efesios 6:12). 

Cada persona parece tener un ángel que le es asignado por Dios. Por lo menos encontramos en la Biblia alusión a la creencia de las personas en los tiempos bíblicos respecto de que una persona tiene un ángel. Veamos el caso de Pedro: ¨Y habiendo considerado esto, llegó a casa de María la madre de Juan, el que tenía por sobrenombre Marcos, donde muchos estaban reunidos orando.Cuando llamó Pedro a la puerta del patio, salió a escuchar una muchacha llamada Rode, la cual, cuando reconoció la voz de Pedro, de gozo no abrió la puerta, sino que corriendo adentro, dio la nueva de que Pedro estaba a la puerta. Y ellos le dijeron: Estás loca. Pero ella aseguraba que así era. Entonces ellos decían: ¡Es su ángel! Mas Pedro persistía en llamar; y cuando abrieron y le vieron, se quedaron atónitos¨ (Hechos 12: 12-16).

Pero un caso que sin lugar a dudas se refiere a la realidad de que cada níño tiene un ángel asignado es el que encontramos en Mateo 18:1-10. Veamos el siguiente versículo de este pasaje que corrobora lo que decimos: ¨Mirad que no menospreciéis a uno de estos pequeños; porque os digo que sus ángeles en los cielos ven siempre el rostro de mi Padre que está en los cielos¨ (Mateo 18:10). Es bueno leer todo el pasaje para entender a cabalidad esta enseñanza.

Pero esto debe ser tratado con mucho cuidado. No estamos diciendo que se haga algún esfuerzo por contactar a ese ángel, pues a quien debemos buscar siempre en adoración, alabanza y oración es a Dios. Si cada uno tiene un ángel, esto es asunto de Dios, y él sabrá cuando ponerlo en acción a favor nuestro. Cuando estemos en peligro inminente de seguro Dios obrará y de seguro ha obrado muchas veces al través de sus ángeles. Así lo vemos en la Biblia, por ejemplo, en el caso de Pedro que fue librado de la cárcel por un ángel: ¨Así que Pedro estaba custodiado en la cárcel; pero la iglesia hacía sin cesar oración a Dios por él. Y cuando Herodes le iba a sacar, aquella misma noche estaba Pedro durmiendo entre dos soldados, sujeto con dos cadenas, y los guardas delante de la puerta custodiaban la cárcel. Y he aquí que se presentó un ángel del Señor, y una luz resplandeció en la cárcel; y tocando a Pedro en el costado, le despertó, diciendo: Levántate pronto. Y las cadenas se le cayeron de las manos. Le dijo el ángel: Cíñete, y átate las sandalias. Y lo hizo así. Y le dijo: Envuélvete en tu manto, y sígueme. Y saliendo, le seguía; pero no sabía que era verdad lo que hacía el ángel, sino que pensaba que veía una visión. Habiendo pasado la primera y la segunda guardia, llegaron a la puerta de hierro que daba a la ciudad, la cual se les abrió por sí misma; y salidos, pasaron una calle, y luego el ángel se apartó de él. Entonces Pedro, volviendo en sí, dijo: Ahora entiendo verdaderamente que el Señor ha enviado su ángel, y me ha librado de la mano de Herodes, y de todo lo que el pueblo de los judíos esperaba¨ (Hechos 12:5-11). 

Recordemos las palabras del salmo 91 que fueron usadas por Satanás para tentar a Jesús. Este pasaje nos habla del cuidado que Dios tiene de nosotros al través de sus ángeles: " Pues a sus ángeles mandará acerca de ti, que te guarden en todos tus caminos. En las manos te llevarán, para que tu pie no tropiece en piedra." (Salmo 91:11,12).   

Como ya hemos dicho, los ángeles son el ejército de Dios: ¨ Bendecid a Jehová, vosotros sus ángeles, poderosos en fortaleza, que ejecutáis su palabra, obedeciendo a la voz de su precepto. Bendecid a Jehová, vosotros todos sus ejércitos, ministros suyos, que hacéis su voluntad¨ (Salmos 103:20-21). En este sentido parecen estar organizados por jerarquías o rangos: querubines, arcángeles, serafines, etc. Pero es imposible en este sermón entrar en detalles acerca de este asunto, así que les recomiendo leer su Biblia y auxiliarse de un buen comentario para estudiar este asunto con más profundidad.

El Angel de Jehová en el Antiguo Testamento es un ángel especial que tipifica a Cristo.

Los ángeles traen mensajes a los hombre departe de Dios. Podemos hablar del caso de Daniel: ¨Y me dijo: Daniel, varón muy amado, está atento a las palabras que te hablaré, y ponte en pie; porque a ti he sido enviado ahora. Mientras hablaba esto conmigo, me puse en pie temblando. Entonces me dijo: Daniel, no temas; porque desde el primer día que dispusiste tu corazón a entender y a humillarte en la presencia de tu Dios, fueron oídas tus palabras; y a causa de tus palabras yo he venido. Mas el príncipe del reino de Persia se me opuso durante veintiún días; pero he aquí Miguel, uno de los principales príncipes, vino para ayudarme, y quedé allí con los reyes de Persia. He venido para hacerte saber lo que ha de venir a tu pueblo en los postreros días; porque la visión es para esos días¨ (Daniel 10:11-14). 

Vemos también en el Nuevo Testamento el caso del ángel Gabriel como el portador de las buenas nuevas del Salvador; los ángeles que dieron las nuevas a los pastores. Además vemos un sinnúmero de apariciones durante la vida y ministerio del Señor Jesús, como es el caso de cómo vinieron a servirle después de la tentación y también cómo le fortalecieron en Getsemaní. Vemos la presencia de los ángeles en la tumba vacía en la resurrección y en la ascensión. Luego en la vida de los apóstoles y la iglesia primitiva, como es el caso de Pablo en el barco, el caso de Cornelio que recibió un ángel en su casa que le dijo que mandara a buscar a Pedro. Y vemos en el Apocalipsis, una revelación de las últimas cosas que fue dado a Juan por medio de un ángel, y el protagonismo de los ángeles en todo este libro.

Los ángeles obran en la ejecución de los juicios temporales de Dios. un ejemplo de esto lo encontramos en 2 Samuel 24:15-18 cuando el ángel mata  a 70,000 hombres por el pecado de David: ¨Y Jehová envió la peste sobre Israel desde la mañana hasta el tiempo señalado; y murieron del pueblo, desde Dan hasta Beerseba, setenta mil hombres. Y cuando el ángel extendió su mano sobre Jerusalén para destruirla, Jehová se arrepintió de aquel mal, y dijo al ángel que destruía al pueblo: Basta ahora; detén tu mano. Y el ángel de Jehová estaba junto a la era de Arauna jebuseo. Y David dijo a Jehová, cuando vio al ángel que destruía al pueblo: Yo pequé, yo hice la maldad; ¿qué hicieron estas ovejas? Te ruego que tu mano se vuelva contra mí, y contra la casa de mi padre. Y Gad vino a David aquel día, y le dijo: Sube, y levanta un altar a Jehová en la era de Arauna jebuseo¨

 Es muy claro en la Biblia que los ángeles obrarán en la ejecución del Juicio final. En la parábola del trigo y la cizaña, narrada en Mateo 13:24-30, vemos esta realidad. Sólo hay que leer el libro de Apocalipsis para percatarnos de esta verdad.

3.- Los Angeles Caídos.

A los ángeles caídos se les llama demonios en la Biblia. Esta palabra proviene del griego daimonia, ¨espíritus malignos¨. Esto quiere decir que esta palabra nos ha llegado a nuestro idioma casi como una transliteración. Estos son los ángeles que hicieron caso a Satanás y desobedecieron a Dios. Se convirtieron en las ¨huestes espirituales de maldad en las regiones celestes¨, de las que habla Pablo en Efesios 6:12. Son comandados por el ¨príncipe de la potestad del aire¨, el mismo que mantiene al mundo impío e incrédulo en esclavitud: ¨Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados, en los cuales anduvisteis en otro tiempo, siguiendo la corriente de este mundo, conforme al príncipe de la potestad del aire, el espíritu que ahora opera en los hijos de desobediencia, entre los cuales también todos nosotros vivimos en otro tiempo en los deseos de nuestra carne, haciendo la voluntad de la carne y de los pensamientos, y éramos por naturaleza hijos de ira, lo mismo que los demás¨ (Efesios 2:2,3). 

Los ángeles caídos han sido expulsados del cielo y lanzados a las ¨tinieblas de afuera¨, para siempre ¨lejos de la gracia salvadora de Dios¨, no se pueden salvar. Están condenados para siempre, y su lugar definitivo será el Infierno en el día del juicio final junto con todos los seres humanos condenados.

Son famosas las posesiones demoníacas, hasta se han hecho grandes producciones cinematográficas como ¨El Exorcista¨ del director William Friedkin (1973). Una posesión demoníaca se diferencia de trastornos nerviosos o cerebrales, aunque también se puede confundir si la persona no es conocedora del tema. Jesús habló de las posesiones demoníacas no como enfermedad, sino como posesiones de espíritus malignos. Jesús hace diferencia entre lo que es una enfermedad y lo que es una posesión de demonios, pues él sanó personas de enfermedades y también echó fuera demonios, dos cosas muy diferentes.

No creo que Jesús fuera supersticioso, y cualquiera persona que analice su perfil sin prejuicios, tal y como lo vemos en la Biblia, tendrá que llegar a la conclusión de que Jesús era una persona completamente cabal y que sabía muy bien diferenciar una enfermedad de una posesión demoníaca.

Jesús echó fuera demonios, exorcizó personas y también los apóstoles lo hicieron. Hoy en día muchos creyentes han participado en actos donde personas poseídas por demonios son libradas en el nombre de Jesús. Los demonios huyen si son expulsados en el nombre de Jesús por un cristiano consagrado.

Los demonios alimentan el error e inducen a la gente al ocultismo. Así que todos aquellos que se relacionan con cualquiera forma de espiritismo, son caldo de cultivo para las posesiones y manifestaciones demoníacas. Es muy conocido el episodio que ocurre en algunos velatorios, donde la persona fallecida comienza hablar al través de alguien que está presente. Por lo que vemos en la Biblia, esto se trata de manipulaciones demoníacas para alimentar falsas creencias acerca del mundo de los muertos en inducir a la gente en la práctica de la necromancia que es como se llama el acto de consultar a los muertos. Pero Dios condena en su Palabra este tipo de actos: ¨ No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos. Porque es abominación para con Jehová cualquiera que hace estas cosas, y por estas abominaciones Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti¨ (Deuteronomio 18:10-12). 

Si usted desea agradar a Dios, debe apartarse de cualquier familiaridad con espíritus malignos, debe confesar sus pecados y venir a Cristo hoy.

Leandro González

Mensaje predicado en la Primera Iglesia Bautista de Mao, República Dominicana, el 3 de Octubre de 2010.