RESEÑA HISTÓRICA

RESEÑA HISTORICA DE LOS COMIENZOS DE LA IGLESIA 

Por: Ramona Simé de Vargas (Gladys), Pionera de esta iglesia.

Recibí a Cristo como mi Salvador y Señor en el año 1969 en la Iglesia Bautista Central de la ciudad de Paterson, New Jersey, Estados Unidos. Se celebraba una campaña evangelística con el predicador pastor Germán Núñez. El pastor de la iglesia de Paterson en ese momento era José Juan Corti, el cual fue de mucha ayuda y apoyo espiritual en mi vida. 

Fui entrenada en talleres sobre evangelismo. Trabajé con la Unión Femenil de la iglesia, llegué a desempeñarme como directora local de las misiones domésticas y foráneas; este trabajo me trajo recuerdos de mi niñez, escuchando el himno “En la Cruz”, pues recuerdo los cultos evangelísticos en las calles de mi pueblo de Mao en República Dominicana, por parte de otras iglesias cristianas. 

Después, en el año de 1975, decidí venir a mi país, al barrio donde me crié, a poner en práctica lo que me habían enseñado en la iglesia en Paterson, New Jersey, Estados Unidos. Tomé una licencia en mi trabajo, pues el Señor me necesitaba para levantar una iglesia en Mao. Yo había sido enseñada en la Iglesia del Libro, me proponía llevar al campo mis humildes conocimientos. 

Empecé reuniendo un grupo en la casa de mi madre. Los domingos visitaba la Primera Iglesia Bautista de Santiago. El pastor en ese tiempo era el misionero Ramón Douglas. Les conté a los hermanos de las reuniones que estaba realizando en Mao, y me ofrecieron ayuda con la música. 

El hermano Henry Nazar y el pastor Ramón Douglas venían todos los sábados. Los cultos comenzaron a tener mayor asistencia, y a las personas les gustaban mucho los coros e himnos que cantábamos. Nos reuníamos ahora al aire libre, debajo de un árbol de almendra, frente a la casa de mi madre. Recibió al Señor una persona, Mercedes Durán. Luego regresé a Estados Unidos en el mes de marzo, después de hacer un trabajo misionero por tres meses. Me mantenía orando por la semilla sembrada. Los hermanos de la iglesia de Santiago, Henry Nazar y el pastor Ramón Douglas quedaron a cargo de la obra. 

Estando en Estados Unidos, recibí una carta del hermano Ramón Douglas, en la cual me decía que sin mi animación y mi presencia la gente no se reunía. Esto me dio mucha tristeza. Lo conté a mi pastor en Paterson, el hermano Corti, y a su esposa Ada, hermanos de mucha fe: - “no se desanime hermana, ya cuando usted vuelva, podrá continuar, sigamos orando”- me instruyó el pastor, y me dio algunas recomendaciones paso por paso de lo que debía hacer. 

Por fin vine de nuevo a República Dominicana, el 11 de Septiembre de 1980, de retirada con mi esposo y mis dos niñas. El día 21 del mismo mes empecé a tener cultos en la casa de mi madre, con la única ayuda del Señor y la oración sin cesar. Nos reuníamos once (11) personas semanalmente. 

Me hice miembro de la Primera Iglesia Bautista de Santiago, y les hice saber de la misión en Mao y mi interés de seguir trabajando allí, y me enviaron un misionero de la iglesia, al hermano Estanislao Alvarez. Además me suplieron de himnarios y tratados. Dos personas fueron bautizadas. 

Pasado un año, comenzó a visitarnos el hermano Danny Castillo y me dijo que hablaría con los hermanos de la iglesia de Puerto Plata para que ellos continuaran ayudando en Mao, ya que esa iglesia tenía muchos jóvenes dispuestos a trabajar, además porque en Santiago había muy pocos obreros. 

Pasó un buen tiempo para que viniera algún hermano de Puerto Plata. Pero a pesar de que yo tenía que estar viajando a Estados Unidos, siempre que estaba en el país me congregaba con el grupo. La asistencia mermaba siempre que la obra se dejaba sin obrero. 

Muchas barreras se me presentaron.  La Palabra de Dios me dio fortaleza. Siempre recordaba Filipenses 4:13 “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”. Pasaba el tiempo, yo permanecía en la doctrina bíblica dando estudios bíblicos y fortaleciendo a los hermanos, orando cada día a Dios que enviara “obreros a su mies” (Mateo 9:38). 

En el año de 1984, la Primera Iglesia Bautista de Puerto Plata envió a Andrés Martínez, quien se dedicó por un periodo de dos años a la iglesia aquí. Alquilamos una casa en la calle Máximo Cabral, Esq. San Roque. Pasamos algunos meses allí, y una persona fue bautizada. Más adelante alquilamos otra casa en la calle Numa Pompilio Ramírez, Esq. Restauración, en Sibila, orientados por el misionero Pablo Siebennnman. Aquí teníamos mejor asistencia, más adolescentes que adultos. 

En 1986, mientras me preparaba para viajar a Estados Unidos, se presentó un joven de nombre Leandro González a hablar con nuestra misión, pidiendo unirse a la iglesia Bautista de Mao. Nos contó que hacía once (11) meses que habían salido de su iglesia aquí en Mao, por rezones atendibles ,él y un grupo de 15 hermanos de esa iglesia, y que hasta el momento se reunían en la casa de un hermano, pero que estaban buscando una iglesia organizada para hacerse miembros. 

Me fui a Estados.Unidos preocupada por estos jóvenes y oraba al Señor por ellos, pues veía que no había una respuesta departe de la iglesia en Puerto Plata. Cuando regresé al país de nuevo, encontré que la Primera Iglesia de Puerto Plata estaba capacitando a un joven dejarlo al frente de la iglesia, pues el actual pastor Andrés Martínez se iría a vivir a  Estados Unidos, lo cual fue de mucha tristeza para mí. Pero oraba al Señor que se hiciera su voluntad. El grupo de personas que habían solicitado membresía empezó a visitar la iglesia. Para ese tiempo también recibíamos la visita del hermano Roberto Durán de Puerto Plata, quien venía todos los fines de semana. 

Me di cuenta de inmediato que en esas personas que habían venido a nuestra misión, había dones espirituales hasta para que la iglesia eligiera un pastor. Por eso le pedí a la iglesia de Puerto Plata que vinieran a instruirnos, pues ya contábamos con un número suficiente de hermanos para pedir la incorporación de la iglesia a la Convención Bautista Dominicana. La Convención pedía un pastor de la misma congregación, por eso convocamos a una asamblea de la pequeña iglesia en la casa del hermano Leandro González en la calle San Roque  #25, y esa noche de diciembre de 1986 la iglesia eligió por unanimidad al hermano Leandro González como pastor, el cual ha sido de mucha bendición para esta iglesia y creo que fue una oración contestada. Para 1988 ya nos habíamos hecho miembros de la Convención Bautista Dominicana.  

Luego pedimos al Señor por un templo y el Señor nos suplió esa necesidad, pues pudimos comprar con la ayuda de la International Mission Board, un edificio en la Gastón F. Deligne, Esq. Máximo Cabral, en Sibila, donde se edificó el templo en 1988 en el que estamos en la actualidad. También el Señor nos ha permitido construila casa pastoral que se encuentra encima del templo, con ayuda de hermanos de otras congregaciones hermanas en Estados Unidos y Brasil, y con la valiosa ayuda de los misioneros Roger Gaunt y Pablo Siebennman.

Doy gracias a Dios por todo esto y  como dice el apóstol Pablo: ¨Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado; pero una cosa hago: olvidando ciertamente lo que queda atrás, y extendiéndome a lo que está delante,  prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús¨.  


Ramona Simé de Vargas (Gladys). 

NOTAEn el año 2006 esta iglesia fue registrada en la Oficina Nacional de la Propiedad Privada, bajo el nombre de Primera Iglesia Bautista de Mao, Valverde. Luego fue beneficiada con el decreto de incorporación correspondiente. Todos estos trámites fueron realizados por el pastor Leandro González con la asesoría de la Dra. Angela Díaz. 

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